La ubicación del hotel es muy buena, a 10 minutos de cualquier sitio importante y con el metro y alguna parada de autobus en la puerta.
El personal muy amable, te informa de lo que necesites y se comunican en frances, inglés y algo de español.
La limpieza del hotel muy buena y el desayuno (sin ser espectacular) no está mal: zumo, café, fruta, embutidos, tortitas,...
Volveriamos sin dudarlo.