Desde el momento en que llegué al Sofitel Bogotá Victoria, supe que estaba a punto de disfrutar de una experiencia única. Este hotel combina la elegancia de la marca Sofitel con el cálido y acogedor ambiente colombiano, lo que crea una atmósfera inigualable.
La ubicación es inmejorable, situada en una zona tranquila y exclusiva de Bogotá, cerca de restaurantes, centros comerciales y principales atracciones turísticas, lo que permite una estadía cómoda y práctica.
El servicio es de primer nivel, con un personal atento y siempre dispuesto a hacer que tu experiencia sea memorable. Desde la recepción hasta los camareros del restaurante, todos hacen que te sientas como en casa. Me sorprendió la rapidez y eficiencia al hacer el check-in y la amabilidad de cada miembro del equipo.
Las habitaciones son simplemente espectaculares. Elegantes, espaciosas y con una decoración moderna pero con toques de lujo que hacen sentir el confort en cada rincón. La cama es increíblemente cómoda y las vistas a la ciudad son impresionantes, especialmente al amanecer. Además, los amenities de baño son de alta calidad, lo que añade un toque extra de sofisticación.
Valoración de 5 estrellas sin lugar a dudas.