Mi estancia en el Hotel Meliá Valencia fue muy satisfactoria. La habitación era espaciosa, moderna, limpia y muy cómoda, con camas cómodas y buenas vistas, especialmente por la noche. El baño tenía ducha y bañera separadas, aunque noté que la ducha podría mejorarse. El hotel es moderno y está bien comunicado, con una parada de metro cerca que facilita el acceso al centro de Valencia.
El personal fue amable y profesional en todo momento, desde la recepción hasta el restaurante y el spa, donde el servicio fue excelente. El desayuno bufé ofrecía una buena variedad de productos, aunque algunos huéspedes consideraron que la calidad podría mejorarse ligeramente para un hotel de cinco estrellas. La zona de la piscina es pequeña para el número de huéspedes, pero en general las instalaciones son modernas y cómodas.
Hay que tener en cuenta que el aparcamiento es de pago y algo caro, pero muy práctico si se llega en coche. También se agradecen detalles como la cafetera con café y té gratis en la habitación y la posibilidad de acceder a servicios exclusivos si se reserva un paquete Level.
En resumen, el Hotel Meliá Valencia ofrece una experiencia de alta calidad con habitaciones amplias, buen servicio y una ubicación ideal para explorar la ciudad, tanto para viajeros de negocios como de ocio.