La ubicación del lugar es maravillosa. Viajé sola y llegué a Roma muy tarde porque la aerolínea (Ryanair, muchas gracias) sobre vendió mi vuelo, y tenía mucho miedo de perderme en una ciudad que no conozco. Pero, la ubicación de verdad que es fabulosa. Queda a 100 metros de la estación del metro, y tiene todo lo que puedas necesitar a unos pocos pasos. Es un lugar de mucho comercio (con dos restaurantes justo en la puerta frontal del hotel), y sin embargo, el ruido no llega a la habitación.
Fue un poco difícil encontrar el lugar, porque aunque está perfectamente visible y accesible, el hotel no está rotulado. Sugiero que escribas por direcciones antes para no perderte. Es muy fácil llegar, pero, sin el rótulo, te pierdes un poco buscando qué puerta es.
La habitación era perfecta, amplia, cómoda, preciosamente decorada y con todo lo que necesitas. 5 estrellas bien ganadas. Hay refrigerador, microondas y caja fuerte. Además una TV que no usé, pero, bastante grande. Su personal fue muy amable, y hablaban español.