Las habitaciones son muy cómodas, en especial la cama, mucha limpieza en las mismas. El agua de la alberca es templada, no caliente ni fría, el horario es bastante prolongado.
El bar es muy bonito, la vista es hermosa, sin embargo el servicio no fue lo mejor, tardaron demasiado en servirnos los cócteles que pedíamos, hasta 40 minutos, así que recomiendo que pidan cerveza, la comida no es lo mejor y la carta es muy limitada, como es en la terraza se siente demasiado el aire, hay que tomarlo en consideración para llevar chamarra o suéter. A pesar de esto siento que es buena opción subir a verlo y pasar un rato en esa terraza tan bonita.