Massimiliano nos dio excelente atención, fue súper amable, nos dio recomendaciones y orientaciones en la ciudad, nos sentimos como en casa. La habitación muy amplia y cómoda, almohadas y colchones deliciosos, ambiente tranquilo, descansamos muy bien. El desayuno sencillo pero muy bien para empezar el día, te lo llevan a la habitación calientito. El hotel está en excelente ubicación para tomar trenes y metro, solo caminas unos pasos y es seguro. Volvería a hospedarme aquí definitivamente