El todo incluido es con los horarios que ellos imponen, llegamos a las 5:30 y no pudimos comer nada hasta las 7:30 que abren su restaurant a la carta, elegir entre 3 o 4 diferentes platillos según el tema que ellos mismos eligen, o esperar a las 9 a la cena. El frigobar vacio, los bares cierran temprano, el más tarde es el del lobby a las 12, esperábamos más de este hotel, ya que hemos estado en otros all inclusive donde a cualquier hora está disponible el bar y dónde llegar a comer o cenar, el frigobar lleno de agua, cerveza y de más bebidas...