Ubicado estratégicamente entre Parque Lleras y El Poblado, este hotel ofrece una excelente localización para quienes desean explorar lo mejor de Medellín. Las instalaciones son modernas, las habitaciones se mantienen impecablemente limpias y la cama es realmente cómoda, ideal para un buen descanso. El desayuno, disponible a diario, es una ventaja adicional, y el servicio en general es de primera. Además, tuve la oportunidad de solicitar un masaje terapéutico y la experiencia fue excelente. ¡Muy recomendable!