Es un Hostel con todas las letras. No es accesible, las escaleras son bien empinadas al estar en una típica casa de Amsterdam. La primera noche tuvimos problemas con la cama ya que el colchón era muy malo y no tuvieron problema en cambiarnos apenas le dijimos. La cama doble en la descripción decía Queen size pero era de plaza y media (1,30)
El desayuno bien, variado, tienen lockers para dejar tu equipaje.