Cerca del lago Jokulsarlon,con una cascada detras,vistas espectaculares, se ve la aurora desde el sofá del comedor si el cielo está despejado.Muy cómodo con sus dos baños.No hay supermercado en kilómetros, llevar víveres suficientes.Muy limpio y tranquilo. Que depresión volver a nuestro mísero piso de Madrid.